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NOTICIAS | UFOLOGIA
¿Se trata de un platillo volante de otro planeta o podría ser la forma que quiso darle el autor a alguna  divinidad?
¿Se trata de un platillo volante de otro planeta o podría ser la forma que quiso darle el autor a alguna divinidad?

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Sin lugar a dudas, las obras pictóricas renacentistas relacionadas con temas de hondo contenido religioso, en las que se plasmaban vírgenes, ángeles, santos y pasajes de la Biblia, fueron sumamente populares.

La extraña vinculación entre pinturas religiosas y acontecimientos de tipo paranormal, ha estimulado a que se haya escrito e investigado muchísimo sobre el tema.

Una de esas obras en particular, que se ha llevado a estudio en las últimas décadas, es la conocida “La Virgen con el Niño y San Juan” (La Madonna Col Bambino e San Giovannino), un cuadro en el que se representa a la Virgen María junto a un pequeño San Juan, que sostiene entre sus brazos al niño Jesús.

Esta famosísima y particular obra, se halla expuesta en la Sala d’Ercole del Museo Palazzo Vecchio, en Florencia, Italia.

Erróneamente, en una gran cantidad de ocasiones, se le ha atribuido la autoría de la obra a Fray Filippo Lippi, otro pintor renacentista que residió en la Florencia del siglo XV.

Y, aunque no se conoce con certeza quién es su autor, se ha determinado que se podría tratar de Sebastiano Mainardi o de Jacopo del Sellai, dos pintores de la bella ciudad toscana, que fueron coetáneos y cuyas obras se asemejan.

En dicha pintura, se puede observar, claramente, en la esquina superior derecha, un extraño objeto brillante, suspendido en el cielo y con el mar como fondo.

Y, bajo ese extraño objeto ovalado, que muchos aseguran podría tratarse de un OVNI, se ve una figura humana. Es un pastor, con su mano derecha sobre los ojos, como cuando alguien trata de ver algo muy brillante, que está lejano o en el horizonte.

Este cúmulo de coincidencias, presentes en el cuadro, ha hecho que un gran número de especialistas en ufología estudien detenidamente la pintura y planteen hipótesis y saquen conclusiones sobre el objeto volante que se puede observar en la pintura.

¿Se trata de un platillo volante de otro planeta o quizás podría ser la forma que quiso darle el autor a alguna divinidad o ser superior?

La misteriosa figura ovalada, que se mantiene suspendida en el cielo, deja entrever una especie de torre y, de la misma, se desprenden unos poderosos rayos de luz. Como se ha indicado anteriormente, bajo el objeto, está situado el pastor que lo observa y junto a éste hay un perro que le ladra en dirección al “platillo”.

Hay que tener en cuenta, que en plena Edad Media, no existía ningún tipo de artilugio que pudiese sobrevolar los cielos, lo que hace pensar: ¿en qué se pudo haber inspirado su autor para pintar la extraña figura?

Muchas interrogantes han quedado abiertas desde que se decidió investigar a fondo la enigmática pintura, pero ninguna respuesta se ha podido dar con certeza, al igual que nadie ha descartado categóricamente la hipótesis de que, realmente, se trate de un OVNI.

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