William Pardo | Octubre 13, 2015
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La “British Earth and Aerial Mysteries Society” (BEAMS), publicó un informe bastante extraño, de 109 páginas, tras realizar una “investigación especial” en el antiguo edificio de la Agencia de Evaluación e Investigación de Defensa del Ministerio de Defensa de ese país, MoD, ahora en manos de Qinetiq, una de las empresas lideres en sectores tan importantes para la seguridad y la defensa del Reino Unido, como lo es el desarrollo aeroespacial.
Los miembros de BEAMS afirman que en la población de Farnborough, en el sureste de Inglaterra, se ha producido por años una gran actividad en cuanto a avistamientos OVNIS y abducciones alienígenas se refiere. Y piensan, que todo ello podría estar conectado con una base secreta que, aseguran, han descubierto en sus inmediaciones.
El grupo está totalmente convencido que en la misma suceden cosas, tan o más importantes que en su superficie, y que lo que allí acontece tiene mucho que ver con los extraterrestres, OVNIS, la defensa intergaláctica y el desarrollo del vuelo futurista.
Su arriesgada teoría se sustenta en los testimonios de presuntos delatores de los servicios de inteligencia británicos, que afirman haber “descubierto” en su interior una serie de símbolos crípticos de supuesto origen alienígena, y a la información obtenida de un grupo de investigadores psíquicos, de acuerdo a la información publicada por el diario británico Daily Express.
La página web de dicha sociedad, dice que BEAMS fue creada en 1991, como un grupo sin ánimos de lucro, con el objeto de llevar a cabo el estudio de distintos fenómenos paranormales, en todo el Reino Unido.
“Hemos puesto en marcha toda una red de investigadores, en activo, que dan a conocer la información por ellos recopilada, a través de la excelente infraestructura mantenida por nuestra sociedad”, comentan.
“Como reporteros de la verdad, las funciones del Equipo de BEAMS incluyen la investigación, la realización de entrevistas, la fotografía y el periodismo”, indican.
Dos de sus principales investigadores, Kenneth Parsons, su presidente, y Hilary Porter, una presunta víctima de “abducción extraterrestre”, llevaron a cabo la “investigación” gracias a las evidencias que, sobre dicha área, obtuvieron de los delatores del gobierno británico.
Aseguran que la evidencia irrefutable, descubierta en la base secreta, son los signos crípticos que han sido descritos por todo el edificio y otras dependencias de la misma.
La pareja de investigadores llegó a la conclusión de que parte del sistema vial del sitio ha sido diseñado para lucir como un extraño ser extraterrestre, representado en antiguas pinturas aborígenes de Australia, lo que sería toda una seña de la importancia otorgada a esta base.
Además, aseguran que parte del edificio se ha hecho a semejanza de un platillo volador.
El informe, reza: “Al igual que sucedió con la supersecreta Area 51 de Nevada, que “no existió” oficialmente durante décadas... lo que estamos a punto de exponer “tampoco existe”, algo que están obligados a mantener. Entonces, nuestro gobierno y el estamento militar no tienen por que temer, absolutamente, que nosotros hablemos de ello… ¿O sí?”
Los investigadores afirman que el espacio ocupado por Qinetiq es la mas grande de las tres instalaciones subterráneas secretas, que se sospechan existen en el Reino Unido.
En su informe, aseguran que sus fuentes les habrían revelado que: “Los oficiales en Chicksands simulan periódicamente los posibles resultados de una guerra nuclear con sus contrapartes, que operan desde el centro de mando subterráneo mantenido por Qinetiq en Farnborough”.
“Uno de nuestros confidentes, con un puesto bastante importante en el gobierno, dice que conoce a varias personas que trabajan actualmente en instalaciones subterráneas británicas, en las que se están llevando a cabo programas con tecnología y genética proveniente de los alienígenas”, cuentan.
Señalan, igualmente, que todo el complejo, conocido como el Parque Tecnológico de Cody, se halla bajo unas medidas extremas de seguridad, con un gran número de guardias armados y un sinfín de cámaras de seguridad secretas diseminadas por todo el lugar.
Pero el punto clave, en su opinión, se halla en la rotonda cercana a su edificio principal.
Haciendo referencia a una imagen aérea de las calles del lugar, en la que se destaca esta rotonda, el informe afirma: “Sugerimos que ésta es una representación estilizada, esquemática, de la figura de un mítico ser gris reptiliano. El mismo ser creador, que las pinturas aborígenes intentaban representar y que, como ésta, sólo pueden ser contempladas desde el aire”.
“¿Por qué está allí?”, se preguntan. En su informe, cuestionan por qué incorporar una imagen tan desmesurada de un alienígena, un ser creador supremo, en la superficie de una base militar subterránea ultra secreta. Un algún lugar tan susceptible, “que es prácticamente el equivalente británico del Area 51, del desierto de Nevada”.
Suponen, que los poderes detrás de tales instalaciones confiaban en que el público nunca vería a través de su código críptico. Pero que, “aquellos” que sí tenían que reconocerlo, lo harían al instante.
Pero, si en dicha rotonda no estuviera la clave, aún hay algo más.
La pareja de investigadores llegó a la conclusión de que el techo y la cubierta del edificio principal habían sido diseñados, a propósito, con la forma de un platillo volador, sólo para recalcar el propósito de la base en aquellos que conocen su secreto.
Afirman que la existencia de ciertas partes “subterráneas” del lugar, descritas por sus “fuentes”, se hizo aún más evidente cuando la empresa Qinetiq anunció su participación en actividades mineras. Algo que podría explicar el extraño ruido sordo, proveniente del subsuelo, que presuntamente se ha podido escuchar a través de todo Farnborough, en los últimos 15 años. ¿Estaban expandiendo en secreto sus instalaciones?
Tres psíquicos diferentes, especializados en videncia remota y sin conexión entre ellos, dieron el nombre del sitio. Pero no hay más detalles. “Sólo, que los mismos, describieron una base subterránea de muy alta tecnología, bastante inquietante”, alegaron.
¿No está convencido? Tampoco lo están algunos investigadores del fenómeno OVNI.
Nigel Watson, autor del bestseller “OVNIS: La conexión nazi”, dijo al respecto: “Parece que están tratando de unir un cúmulo de cosas muy distintas para tratar de construir algo, hacer un conjunto”.
Sin embargo, agregó, “la idea de bases bajo tierra de seres alienígenas o platillos voladores no es “nada nuevo”, se remontan al menos al año 1962, cuando Albert Bender, fundador del International Flying Saucer Bureau (IFSB) en Bridgeport, Connecticut, declaró que un grupo de seres extraterrestres lo habían trasladado hasta un cuartel subterráneo, oculto en la Antártica”.
“Los escépticos creen que estas historias son el producto de la desinformación maliciosa o de la fantasía, pero eso no impide que la gente deje creer en su existencia. Si todos pudiéramos ir a ese “refugio” de platillos voladores, seguro que creeríamos”, dijo.
Un periodista, del sitio web “eExpress.co.uk”, contactó con los responsables de la empresa Qinetiq para conocer sus impresiones sobre las extrañas informaciones vertidas por la pareja de investigadores.
“Estamos echando un vistazo muy detallado a todo el expediente y trabajando en la respuesta”, comentó un portavoz de la empresa.
Un vocero del Ministerio de Defensa británico, al ser consultado, se limitó a decir: “No hacemos comentarios acerca de OVNIS”.
Julio de 2007 - Luces de OVNI sobre Farnborough. No son imágenes generadas por ordenador, ni linternas chinas o luces provenientes de los coches |
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WILLIAM PARDO
Nacido en Caracas, Venezuela, William Pardo es un periodista que ha dedicado gran parte de su trabajo a la investigación de temas relacionados con el misterio, como el fenómeno OVNI y la Teoría de la Conspiración. Ha vivido en Estados Unidos, España, Holanda y el Reino Unido, país en el que reside en la actualidad
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