Redaccion | Enero 09, 2014
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Edgar Mitchell, el entiguo astronauta de la NASA, fue uno de los actores implicados en dar a conocer una rara fotografía en la que, supuestamente, se podia observar a uno de los seres alienígenas que perecieron en aquel accidente, cerca de Roswell, Nuevo México, en 1947.
Una imagen que, lamentablemente, ha sido considerada de forma unánime como un burdo engaño.
Pero, y a pesar que el evento de la semana pasada, “beWitness”, no ha de cambiar la historia de la búsqueda de vida extraterrestre, como se nos había prometido, Mitchell se mantiene firme en su creencia de que fueron más de uno los extraterrestres que murieron en aquel accidente, hace casi 70 años, y que, incluso, algunos de ellos fueron capturados vivos.
El astronauta, invitado para asistir en persona a la conferencia celebrada en la ciudad de México, con la asistencia de unas 6000 personas, hizo acto de presencia por videoconferencia, “ya que, con mis 84 años, soy demasiado viejo para viajar”, alegó.
“La verdad de todo, es que fue real. Yo estaba allí cuando el Incidente de Roswell se produjo. Me acababa de graduar en la escuela secundaria e Iba rumbo a la universidad”, cuenta.
“Un día, el Roswell Daily Record, que era uno de los periódicos de aquella pequeña localidad, publicó una noticia acerca de un supuesto artefacto de origen extraterrestre, que se habría estrellado en las inmediaciones de la ciudad. Al día siguiente, todo había sido silenciado por la Fuerza Aérea, diciendo que se trataba de un globo meteorológico”, apunta.
“Muchos años después, y tras haber estado en la Luna, volví a la ciudad para dictar unas conferencias. Salí a caminar por Roswell, para hablar y encontrarme con gente que conocía desde que era niño”, recuerda.
“Muchas de las personas que conocía, así como descendientes de las personas que habían participado en aquel incidente, me contaron sus historias”, señala.
En una entrevista concedida esta misma semana al HighCountry News, hace referencia a algunos de esos descendientes, incluidos el hijo de un empresario de pompas fúnebres que proporcionó “ataúdes para los cuerpos de los extraterrestres” y al hijo del sheriff, que “debió mantener al tráfico lejos del lugar del accidente”.
En su charla con dicho medio, entre otras cosas, habla del por qué las autoridades de todo el mundo han mantenido “las visitas de seres alienígenas como un gran secreto de estado”.
En referencia, a la ahora muy criticada imagen del “ser alienígena” que dieron a conocer en la conferencia, Mitchell señala: “Son, ciertamente, los restos de un ser no humano, muy parecido a como se supone son los pequeños grises”.
Mitchell, aprovecha la pequeña conmoción causada por su afirmación, para lanzarnos una nueva reflexión: “No sabemos que seres hay en el Universo, porque nuestro planeta es como un grano de arena en una playa sin fin”.
¿Debemos creerle? No en vano, fue el sexto hombre en pisar la Luna como integrante de la misión Apolo 14, en 1971.
“Incluso, un buen amigo de la familia, un mayor de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos, me confesó que todo había sido cierto”, agrega.
“Fui guardando las historias de todas esas personas en mi cabeza y, cuando volví de la Luna, fui al Pentágono y tras contarles todo lo que pensaba de ello, les pedí que me dijeran cual era su opinión al respecto”, cuenta.
El almirante con el que se entrevistó, cuenta, le dijo no conocer nada al respecto, pero le prometió averiguarlo. “Fue a Nuevo México a verificado todo, y cuando regresó me dijo: Sus historias son correctas y todos los hechos son reales”.
Mitchell afirma que el gobierno de los Estados Unidos encontró alienígenas, tanto muertos como vivos, a bordo de la nave siniestrada. Sin embargo, cubrieron el Incidente Roswell porque no sabían si los “visitantes” eran hostiles y no querían que la antigua Unión Soviética supiera nada al respecto.
Cuenta que las agencias gubernamentales no sabían qué hacer con el platillo extraterrestre siniestrado y su “tecnología superior”, por temor a que cayera en manos soviéticas.
“Lo mejor, simplemente, fue mentir al respecto y mantenerlo sólo para ellos”, cuenta. Así que, lo etiquetaron como “above top-secret” (por encima del más alto secreto), y se creó una larga cortina de hierro que, finalmente, separó a un pequeño grupo del gobierno de los Estados Unidos oculto del resto de la población”.
También afirma haber sido plenamente consciente de “muchas visitas de OVNIS a la Tierra”, durante su carrera con la NASA.
El ya anciano ex astronauta, tiene programada una charla sobre el tema, titulada “Contacto en el desierto”, durante una conferencia sobre ufología, que tendra lugar a finales de este mes en el Joshua Tree Retreat Centre, de Joshua Tree, California.
Entrevista de Jaime Maussan a Edgar Mitchell | BeWitness |
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