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ZenMate proporciona diversos servidores ubicados en diferentes partes del globo
ZenMate proporciona diversos servidores ubicados en diferentes partes del globo

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Dicen que al campo de Internet no se le pueden poner puertas. Pero no es verdad del todo, ya que todos en uno que otro momento nos hemos encontrado ante la tesitura de que no podemos disfrutar de un servicio determinado porque está bloqueado geográficamente o algo parecido.

Afortunadamente, tenemos los VPN y los proxys que permiten el saltarse esas restricciones. Sin embargo, a ojos del usuario medio, configurarlos en condiciones no resulta nada fácil, un problema que se resuelve con la extensión para el navegador web Chrome llamada ZenMate.

La misma vio la luz hace unos meses, acaban de anunciar que ya han superado el millón de usuarios, y de manera resumida podemos decir que se trata de un complemento de Chrome el cual permite navegar por la red desde el navegador que nos ocupa haciendo pasar el tráfico por servidores de terceros.

Dicho en otras palabras, al instalar ZenMate y acceder a una web, esa petición de acceso llega a un servidor de terceros que a su vez la manda al sitio e igual a la inversa; el sitio detecta la petición del servidor, le responde, y este manda la respuesta al usuario.

Muy bien, ¿y eso a efectos prácticos qué significa? Pues que al haber un servidor intermediario entre las webs y los usuarios, las mismas reciben las peticiones de dicho servidor, con lo que las webs identifican que las visitas llegan a través del país en el que se encuentre el servidor y no vía el usuario.

O decir, si una persona que reside en España, quisiera acceder a Netflix, sitio que no opera en ese país, lo podría hacer instalando ZenMate y configurando en él un servidor de los Estados Unidos, nación nativa del servicio, ya que a Netflix le llegaría la petición de acceso desde ese país.

Lo mejor de todo justamente es que una vez instalado, ZenMate proporciona diversos servidores ubicados en diferentes partes del globo, y entre todos prácticamente cualquier usuario puede acceder a cualquier web desde cualquier lugar del mundo. Y además lo hace de forma muy simple, o la otra gran baza de la extensión: sólo hay que instalarla, crear una cuenta, activar la extensión, elegir el servidor que mejor nos cuadre en cada momento y listo, ya estaremos navegando mediante él.

Además, o la tercera gran cosa del invento, ellos mismo explican que ZenMate va más allá que otras opciones parecidas porque no sólo elimina las restricciones geográficas, también cifra completamente todo el tráfico “con los más altos estándares de seguridad” gracias a lo que el usuario navega de forma más segura y privada.

Así que ya sea por el tema de saltarse las restricciones de ubicación o por mejorar la privacidad, instalar ZenMate es muy recomendable. Nosotros llevamos unos días probándolo y aún no le hemos encontrado ninguna pega, ni siquiera se nota una ralentización de la conexión, algo que suele ocurrir cuando se navega con un VPN o proxy gratuito de por medio.

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